Situado en la cuenca del río Vero, es un magnífico lugar para emprender excursiones, acercarse a los puentes del Barranco de las Palomeras y de las Gargantas y contemplar los abismos que se abren entre los conglomerados del Fornocal.
El laberíntico y apiñado casco urbano de Colungo, conserva algunas casas solariegas del siglo XVI (Casa Notario o Casa Broto) y del XVIII (Casa Avellanas).
La iglesia parroquial fue erigida en el siglo XVI en estilo gótico tardío. Al exterior, las numerosas marcas de cantero nos remiten a la cuadrilla que trabajó en su construcción bajo la dirección del gran maestro Joan Torón.
Tradicionalmente se aprovechaba el vino agrio para la destilación del aguardiente; en la actualidad se elaboran aquí licores de café, té, frutas silvestres, orujo y sobre todo, el anís que ha hecho famoso a Colungo.
En Colungo también es posible introducirse en el fascinante mundo de la prehistoria, visitando el Centro de Interpretación del Arte Rupestre.
No debe dejar de visitarse la "olivera" milenario de la "Demba de Nadal", que aseguran, fue plantada por los "moros". Todos los años su dueño obtiene una cosecha excelente. Aunque su altura y tamaño son semejantes a otros olivos del entorno, su tronco, que apenas puede ser abarcado por cuatro personas, posee unas dimensiones extraordinarias (13,65 m. de perímetro en su base). El tronco tiene una pequeña entrada, por lo que ha servido también de refugio en caso de tormenta. Cuenta con un régimen de protección especial y ha sido incluido en el Censo de Árboles Monumentales de Aragón.
Celebra sus fiestas para El Pilar el día 12 de octubre. También el 12 de febrero celebran el día de Santa Eulalia y se reparte "la caridad". Asimismo conserva la celebración de la Noche de las Ánimas.
Más información en el siguiente enlace Comarca de Somontano. Colungo.